La tela de cobre

Quiero contar esta historia porque vale la pena leerla...

En enero del año pasado como meta del 2019 me propuse llegar al menos al sueldo mínimo unos 300 mil pesos, en ese entonces para que, de cierta forma, valiera la pena trabajar de costurera en casa y no sentir culpa por no buscar pega como dependiente.

En marzo participe en el programa @nadatedetienetvn saliendo bruscamente de mi zona de confort, por esos tiempos gracias a una gran mentora que me asignó el programa descubrí la tela con hilado de Cobre, fue en ese transcurso que me di cuenta que realmente menstruar no discrimina y toma a todas las mujeres y transgéneros por igual y esto incluía a personas con pieles ultra sensibles, piel de cristal, con movilidad reducida, entre otras afecciones.

Todas las personas que menstrúan necesitan mes a mes toallas higiénicas como todas, y les es un martirio usarlas o cambiarlas. Es aquí cuando decidí que necesitaba esta tela especial que previene bacterias y muchas otras cualidades que aporta el Cobre puro, sin ocupar polvos falsos que dicen tenerlo.

Esta tela era carísima para mi en ese entonces y el pedido mínimo era una gran cantidad de kilos de tela. En agosto del 2019 di con el proveedor, me recibieron  en su oficina, muy emocionada no tenía idea de donde sacaría el capital. En ese entonces tenía reuniones con empresarios que financiaban a otros pequeños pero yo ignorante aún, sabía que no era llegar y buscar un socio capitalista así sin más, obvio que todos me decían que estaba perdiendo la oportunidad de la vida y ahí yo explicaba que la vida ya no da solo 1 oportunidad como años atrás si no que es una constante de dar y dar y uno solo debe saber tomarlas a tiempo!

En fin le dije al proveedor que no sabia cuando ni como pero que yo iba a volver a comprarle la tela, y bueno tarde un año en lograrlo pero hoy por fin ya llegaron al taller, se viene el Kit Cobre para brindar más salud y muchas otras novedades más.

Aveces no lo creo pero cuando se que no descanso por correr tras mis metas se que lo puedo todo. En la segunda foto venía de regreso de esa reunión llorando de felicidad de algo inalcanzable pero solo del hecho de ver que quizás en algún momento lo podria lograr.